SOCIEDAD | 30 de marzo de 2015
 

Continúa la imprudencia tras dos muertes en San Martín

Peatones, ciclistas y motociclistas continúan cruzando la doble vía de la Ruta 7 sin utilizar la pasarela aérea que demandó 4.650.000 millones de pesos. Hace dos días, una mujer y su hijo murieron tras ser embestidos por un automóvil.

 
 

Una conductora cruzando la Ruta 7 sin utilizar la pasarela aérea (Foto: Este Online).
 

Por Javier Disparti

 

El sábado pasado, cerca de las 22, Pilar Carolina Cárdenas (35) y su hijo Lucas Facundo (10), que circulaban en una Motomel de 110 cc, perdieron la vida tras ser embestidos por el conductor de VW Gol que transitaba por la Ruta Nacional 7, a la altura de San Martín.

 

Según información policial, la tragedia se desencadenó cuando la mujer intentó cruzar la ruta de Sur a Norte, pero sin utilizar la pasarela aérea que se encuentra a disposición de los peatones que deben cruzar el Acceso Este, a la altura de la calle Pedro Vargas.

 

A pesar de esta tragedia, nuestro medio pudo registrar cómo varios peatones, ciclistas y motociclistas continúan cruzando la peligrosa doble vía sin utilizar el puente que demandó 4.650.000 millones de pesos y que fue un constante pedido de los vecinos de los barrios Villa Italia, El Nevado, Los Parrales, Tropero Sosa o Municipal.

 

También es cierto que el gobierno municipal, en complicidad con el Estado, no realiza controles u obras complementarias para impedir el cruce de motos o bicicletas, como por ejemplo la colocación un guardarrail doble o un muro de cemento.

 

Incluso, a pocos metros de la pasarela aérea, vecinos de la zona han realizado un lomo de tierra sobre el guardarrail del cantero central de la Ruta 7, con el fin de no tener ningún tipo de obstáculo y hasta evitar el descenso de la movilidad y su posterior cruce.

 

Basta con detenerse en el lugar un par de minutos y observar la cantidad de motos, bicicletas y personas que deciden cruzar el Acceso Este poniendo en riesgo sus vidas, a pesar de contar con una alternativa segura que los protege de ser atropellados.

El puente peatonal, habilitado en enero de 2014, posee una estructura premoldeada de hormigón pretensado de 2,50 metros de ancho y 26 de largo, protegida con barandas metálicas y una jaula de seguridad con el propósito de evitar que se arrojen elementos a la ruta.

 

Esta obra saldó una cuenta pendiente que tenía el gobierno ante una importante cantidad de hechos trágicos que sucedieron en los últimos años. Uno de ellos ocurrió en 2007, cuando un ciclista perdió la vida al ser atropellado por un automóvil Volkswagen Polo, conducido por Daniel Zárate.

Otro de los accidentes sucedió en 2012, cuando Sandra Viviana Alonso (56) viajaba en su bicicleta por la Ruta Nacional 7 y, al llegar a la intersección con Pedro Vargas, fue atropellada por una camioneta Ford F100. Por el impacto, la mujer perdió la vida en el acto.

 

 

San Martín a la cabeza de las muertes viales

 

En el corriente mes de marzo se registraron veinte muertes en accidentes viales en rutas y calles de la provincia de Mendoza. De ese total, ocho ocurrieron en el departamento de San Martín, siendo la localidad con más decesos.

 

Sin dudas, la conducta vial es algo que a todos nos debería importar, no sólo a los automovilistas sino también a los peatones, que muchas veces son protagonistas de graves accidentes al no respetar las normas de tránsito.

Los peatones no sólo cometen faltas al no respetar los semáforos o al no cruzar por una senda peatonal; sino que tampoco utilizan las pasarelas aéreas, arriesgando sus vidas y las de los conductores que circulan por las rutas.