En un contexto global por demás preocupante, signado por la pandemia del nuevo coronavirus se hace crucial pensar en el día después. Pensar en lo que vendrá y en trabajar fuertemente en un plan económico para hacerle frente a la crisis financiera y sanitaria que atraviesa a todas las esferas sociales. De esta manera, el Gobierno provincial lanzó Mendoza Activa, una iniciativa que busca reimpulsar la actividad local, apostando al sector privado y pensando en los meses próximos.
En este sentido, más allá de las diversas líneas de acción que se implementan en la actualidad, es importante resaltar que las políticas desde nuestro criterio deben estar focalizadas en el día después, en el qué va a pasar cuando la pandemia ceda o termine y cómo se mantiene el capital social desde ahí, que en Mendoza está simbolizado por las pymes y por la generación de empleo.
Entonces desde la gestión provincial se ha diagramado una política económica que tiene tres puntos básicos:
- Créditos desde el Fondo para la Transformación y el Crecimiento (para pymes con hasta 10 empleados, uno para ganadería y otra para mejorar sistema de riego del agro).
- Programa de empleabilidad llamado Enlace (entrenamiento laboral certificado) que entrenará a 10.000 mendocinos, que tengan entre 18 y 55 años de edad y colegio secundario completo. Las personas incluidas en esta formación pasarán a trabajar en fábricas o comercios por 4 meses de 4 horas al día y hasta 20 semanales y se les entregará una contraprestación de $7.000 por mes (una parte lo paga el Gobierno de Mendoza y otra parte el empleador). Para las pymes que tengan hasta 5 empleados de los $7.000 el Gobierno paga $6.000 y el empleador $1.000 esto va creciendo y el empleador se hará cargo de la contraprestación y en las empresas que tengan más de 25 empleados la contraprestación se pagará por mitades entre el Gobierno y el empleador.
- Programa de Incentivo de Inversión Privada de Mendoza que alcanza a la industria, el comercio, la construcción, el agro, la fruticultura, la horticultura, el forraje y los servicios a excepción de la implantación de nuevos viñedos y la economía del conocimiento, cuyo programa puntual se presentará en los próximos días.
De esta manera, lo que se pretende es fomentar y apuntalar el desarrollo de las pequeñas y medianas empresas con un Estado provincial presente que también buscará que las familias vuelquen sus ahorros y puedan impulsar el sector de la construcción; como así también la creación del Banco de Vinos, para ayudar al sector vitivinícola y a la industria madre de la provincia.
Con esto el Ejecutivo provincial da cuenta de una forma real de pensar en la Mendoza que se viene, en el largo plazo, y que busca sostener el funcionamiento de las pymes locales, cuidar el empleo privado y garantizar los servicios públicos provinciales para dinamizar la economía focalizando en el objetivo principal que es que se invierta en Mendoza y que el dinero circule en la provincia. Acciones concretas pensadas para el bienestar de los mendocinos y para hacer frente a los efectos económicos de esta pandemia.
Por José Orts
Diputado Provincial UCR